Alguna vez te pasó que derepente hacés el click y te das cuenta que no vale la pena preocuparse tanto?
A mi sí. Me acuerdo que pensé, "ya está, ya tengo la receta.. la próxima voy a saber responder mejor y no me voy a hacer tanto mal". Já, que iluso!
Muchas veces llegamos a ese punto en el que nos hacemos concientes de que "hay cosas más importantes". Y sí, siempre las hay. Tarde o temprano, si nos comparamos con otros, nos damos cuenta que nuestros problemas son ínfimos. Se aplica a (casi) todo: amigos, familia, noviazgo, trabajo, etc. De más está decir que no hace falta compararse y que cada uno responde y se ve afectado a su manera.
Pero, por qué tardamos tanto en hacer ese click? Será negación? Es como que cuando algo no nos gusta la primera reacción es cerrar los ojos.
En definitiva, es cuestión de tomar distancia, de abstraerse.
Una mujer muy sabia me dijo una vez, "el agua turbia aclara cuando reposa". Cuánta razón. Pero como en todo, la teoría siempre es más fácil que la práctica.
Creo que puedo resumir todo esto en una frase: un día de mierda.
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Varias veces me paso de hacer ese click, con distintas cosas, en diferentes situaciones.. me paso de pensar que me preocupaba por algo que no iba a cambiar nunca, que no tenia arreglo, que lo que podia hacer yo era minimo o prácticamente nulo, que era la unica del grupo, de la familia, o de la relacion que me preocupaba por eso.. y en cualquiera de esos casos siempre existió al principio la bronca de darme contra la pared, y despues la impotencia de no saber qué hacer, para que lado tirar, como seguir, que creer y que no..
ResponderEliminary creo que lo peor (o lo mejor)de todo es que, aun asi, eso sin sentido que me preocupaba tanto, me seguia preocupando..
entonces, si algo te preocupa, significa que te interesa, que te ocupa un tiempo aunque sea pensar en eso.. que te importa.. y está bien.. por qué dejarías de preocuparte por algo? quién dice que no vale la pena?
si bien no comparto tu frase de inicio, estoy de acuerdo con que el nivel de preocupacion que deberiamos tener frente a las cosas deberia relacionarse con la magnitud de estas,
es decir, no me parece bien hacer un escándalo por una cosa que puede ser mínima, y menos sabiendo que existen situaciones peores o (por lo menos para mi) inimaginables.
En mi opinión es cierto que cuando algo no nos gusta tendemos a cerrar los ojos.. es como un acto de defensa.. como pestanear.. un reflejo.. pero creo que está en vos volver a abrirlos o no, tomar distancia como bien decis y analizar la situacion para decidir qué se puede hacer, qué sería lo mejor, y qué podés hacer vos, si es que te sigue importando, y por supuesto, preocupando.
Sí, "la teoría siempre es más fácil que la práctica", las palabras son mucho mas fáciles que los actos, hablar por mail, msn, facebook y el millon de medios tecnológicos que nos consumen es más fácil que decir esas palabras cara a cara, pensarlo y no expresarlo en ninguno de esos medios es lo más fácil de todo..
pero pensarlo es lo que nos mueve.. expresarlo es lo que buscamos,
y actuar es lo que tenemos que hacer.
Y si "la teoría es más fácil que la práctica", empezá por el otro lado.. y cuando el agua se vuelva clara despues de haber reposado, acordate de la teoría.
Te dejo un beso.
A este tipo de clicks, uno puede intentar ponerlos en palabras, transmitirlos, predicarlos, pero yo creo que son cosas que sólo se vuelven efectivas cuando surgen de uno mismo. Como dice Siddhartha: "La sabiduría no se transmite. La ciencia que un sabio intenta comunicar suena siempre a necedad." Así que te felicito por haber hecho ese click que es un gran paso. Y aunque, como bien decís, cuesta llevarlo a la práctica, una vez que a uno se le hace esta luz, uno trata de mantenerla presente todo el tiempo, de volver siempre a esta idea como para analizar cada situación y definir su grado de gravedad o valorización.
ResponderEliminarPorque para mí el click fue darme cuenta de que lo que solemos denominar como problemas que nos taladran la cabeza como en la publicidad de twistos, se pueden dividir entre cosas solucionables, para las cuales podemos buscar soluciones posibles para hacer que nos dejemos de preocupar por eso que tanto nos angustia, y otras que no, para las cuales no hay nada que hacer a nuestro alcance, y por ende son hechos, que al menos uno no puede cambiar, entonces por qué preocuparse?. Hay veces que son cosas difíciles de solucionar, pero aunque no logremos la solución completa, nos sentimos bien intentándolo y actuando para alcanzarla, y entonces deja de ser una preocupación para pasar a ser una ocupación.
Y de esta forma intento buscar un "estado de preocupación cero": si es algo solucionable, me ocupo de solucionarlo (aunque a veces también recaigo en frustraciones, pero es cuestión de seguir probando soluciones), y si es algo que no puedo cambiar, ni si quiera aportar algo mínimo para cambiarlo, trato de no atormentarme por eso.
Y después pienso: "que cagada que tengamos que pasar por algo malo para hacer un cambio positivo". ¿Por qué es que a veces parece que fuera necesaria la parte mala para hacernos reaccionar? ¿Acaso no podemos darnos cuenta de las cosas a partir de momentos buenos?
Así que propongo, y me propongo, valorizar todas las grandes y pequeñas cosas buenas que tenemos en cada una de nuestras vidas, y a partir de ellas ver qué cosas podemos cambiar, y qué cosas o personas nos importan mucho como para gastar el tiempo y la mente en preocuparnos por boludeces.
pd: qué capa la mujer sabia, alta frase
ResponderEliminar"Anónimo", no sé por qué no pusiste tu nombre pero sinceramente quería nada más decirte que me pareció muy bueno tu comentario y muy constructivo.
ResponderEliminarRescato la frase cuya idea, en cierta forma, expresé en mi comentario anterior.. "Hay veces que son cosas difíciles de solucionar, pero aunque no logremos la solución completa, nos sentimos bien intentándolo y actuando para alcanzarla, y entonces deja de ser una preocupación para pasar a ser una ocupación" .. ya que, por lo menos para mi, preocuparme por algo me lleva a ocuparme, a modo de canalizarlo de otra forma y no seguir torturándome con un pensamiento sabiendo que tengo todo el potencial para hacer algo al respecto, por mínimo que sea, y por más invisibles que sean sus resultados.
"¿Por qué es que a veces parece que fuera necesaria la parte mala para hacernos reaccionar? ¿Acaso no podemos darnos cuenta de las cosas a partir de momentos buenos?" comparto completamente, y creo que en ese sentido somos "hijos del rigor", siempre viviendo al límite, llegando al extremo para caer en la cuenta de.., dándonos la cabeza contra la pared para abrir los ojos.. nunca antes, nunca con tiempo. Pero también creo que es de ésta forma cuando más aprendemos, cuando decidimos hacer algo al respecto sobre lo que nos choca, nos molesta, nos importa... nos preocupa.
Creo que las cosas que surgen de buenos momentos también nos abren los ojos y nos sirven muchísimo en mil aspectos, esos que no se olvidan, que no te cansas de contar, que realmente te llenan y de los cuales lo que recibis es infinito e importante (de distintos modos) para cada uno, pero lamentablemente son las cosas malas las que nos quedan grabadas a fuego.. y como dije en el comentario anterior queda en nosotros qué sacamos de esa experiencia, cuánto nos importa realmente y qué podemos hacer al respecto, sabiendo cómo encarar una situación semejante una segunda vez... o una tercera.. o luego de mil intentos. Siempre vamos mejorando, por mínimo que sea el avance, o por lo menos esa es la idea..
Por último, sugiero también hacer un "parate" y reconocer "qué cosas o personas nos importan mucho como para gastar el tiempo y la mente en preocuparnos por boludeces" , ya que más de una vez estamos tan ocupados o encerrados en temas que nos cuestan y preocupan, que no somos capaces de dedicarle ese tiempo a lo que nos hace bien.. a quienes quizás no tienen una respuesta a nuestro "problema" ni una solución para ofrecernos, pero sí un mate y una charla que nos haga sentir mejor.. una sonrisa que venimos necesitando.. un abrazo que las ideas abstractas y el taladrarte la cabeza no te ofrecen.. un beso que no cambias por nada del mundo.. un rato para olvidarte de todo eso que taaanto te preocupa y te ocupa tiempo, para pasar a "gastar" (o invertir diría yo) algo de ese tiempo con quienes lo convierten en buenos momentos.. quienes tienen el poder de transformar un "dia de mierda" en "un buen día, un buen momento, unos buenos 5 minutos"
El problema está cuando esas cosas y personas que te hacen tanto bien quedan tapadas por tantas preocupaciones, dudas, inquietudes, reglas, políticas, realidades.. obstáculos que vaya uno a saber por qué te alejan de los momentos que una vez buscaste para sentirte mejor, para expresar todo lo que sentís, o para simplemente olvidarte de todo un rato y ser un simple ser humano que disfruta al mango de un momento lindo.. momento que, creo, tanto nos cuesta encontrar hoy en día, el cual, al igual que la preocupación, nos ocupa un tiempo que está en nosotros o no decidir hacernos por y para esas o esa persona que tanto bien te puede hacer.. y vos lo pasás por alto por tener la cabeza en otro lado, o en varios lugares al mismo tiempo..
El tiempo es una inversión que hacemos cuando elegimos cómo actuar, en qué "gastarlo", en quienes...en quién en especial.. y en quién todavía no.
Muy buen comentario, nuevamente.
Acepto la propuesta.
Para Anónimo aclaro: el click no lo hice, ese es el problema.
ResponderEliminarQuiero resaltar lo de Catt cuando dice que """ a quienes quizás no tienen una respuesta a nuestro "problema" ni una solución para ofrecernos, pero sí un mate y una charla que nos haga sentir mejor.. una sonrisa que venimos necesitando.. un abrazo que las ideas abstractas y el taladrarte la cabeza no te ofrecen.. un beso que no cambias por nada del mundo.. un rato para olvidarte de todo eso que taaanto te preocupa y te ocupa tiempo, para pasar a "gastar" (o invertir diría yo) algo de ese tiempo con quienes lo convierten en buenos momentos.. quienes tienen el poder de transformar un "dia de mierda" en "un buen día, un buen momento, unos buenos 5 minutos""" Me encantó
Gracias a ambos.
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